AGUA DA VIDA
La existencia de los seres humanos
sería impensable sin la presencia del agua. Para mantener un ritmo de vida
normal es necesario que nuestra piel y nuestros órganos mantengan contacto
continuo con el agua, ya que los distintos tejidos perderían su composición
natural si dejaran de tener los niveles
de humedad óptimos.
Un ser
humano en circunstancias normales necesita 1.450 mililitros de agua al día, debido
a que perdemos líquido mediante:
- la orina (500 mililitros)
- la respiración (como vapor de agua 600
mililitros)
- el sudor (200 mililitros como mínimo, sin tener
en cuenta condiciones climáticas adversas o la actividad física realizada)
- la materia fecal (150 mililitros)
Por lo tanto es necesario aportar
1.500 mililitros de agua al cuerpo, para que el organismo pueda cumplir con
todas sus funciones vitales.
El 60 por ciento de nuestro
organismo esta compuesto por agua, la cual tiene propiedades físicas y químicas
beneficiosas para el mismo. Sirve como medio de transporte para sustancias dentro
del ser humano, es indispensable en los procesos de digestión, absorción,
distribución de nutrientes, transporte y desecho de elementos tóxicos.
Para que el hígado, los riñones,
el sistema digestivo e inmunológico cumplan sus funciones es necesaria la
presencia de agua, la cual también lubrica las articulaciones y mejora la
resistencia de los ligamentos. Además actúa
como protector, debido a que controla la temperatura, ayuda a mantener
los niveles adecuados de acidez en el cuerpo y retarda los procesos de
envejecimiento. Un consumo equilibrado de este líquido ayuda también a mantener
la belleza del cabello, las uñas y la piel, la cual perfectamente hidratada
luce brillante, ya que se da una regeneración celular por medio de un soporte suficiente
de minerales, nutrientes y por supuesto de oxígeno. El agua es un excelente
colaborador cuando de perder peso se trata, ya que suprime el apetito y ayuda
al cuerpo a metabolizar la grasa acumulada.
Debemos decir que este
importantísimo elemento para nuestro organismo no solo ingresa en nuestro
cuerpo de manera líquida, sino que lo hace mediante alimentos solidos los
cuales contienen grandes cantidades de agua, como por ejemplo fruta.
Tomar agua al levantarse, durante
el transcurso del día y cada vez que se tenga sed, permitirá que todo tu cuerpo
funcione armónicamente, luciendo sano y brillante.
ESTUDIOS
Estudios realizados en la Universidad
de Harvard han concluido que la ingesta de agua en cantidades
apropiadas, reduce un 45%, el riesgo de cáncer de colon y a la mitad las probabilidades de
desarrollar cáncer de la vejiga; debido a que la presencia y expulsión de agua-líquidos evitan una deficiente
hidratación de dichos órganos. Esa falta de hidratación puede provocar mayor concentración
de sustancias tóxicas y cancerígenas en estos órganos.
En la Universidad de Loma Linda en
California se hizo un estudio involucrando a 20,000 personas sanas que
tomaban 5 vasos diarios de agua y las cuales presentaron un menor índice de
problemas cardiovasculares en comparación con los que solo tomaban 2 vasos
diarios.
Universidad de Búfalo en Nueva
York, comprobaron por su parte que el ingerir el agua que nuestro
cuerpo necesita, hidrata las mucosas que recubren la nariz, garganta, bronquios
y pulmones, disminuyendo las probabilidades de infecciones virales como la
gripe común, infecciones bacterianas y la posibilidad en los asmáticos, de
sufrir un ataque agudo.
Existen multitud de estudios
relacionados con los beneficios de beber una cantidad de agua apropiada
diariamente, estos son solo unos ejemplos.